¿Cómo se bebe el té oolong Imperial Formosa?

En una isla recostada a un gigante, se produce un gran té.

Fernando A. Cares

BEBERBIEN. La mayoría de la gente asocia el té oolong con China. Y es cierto que en China se originó el té oolong y que la mayor parte del producido en el mundo hoy es “Made in China”. Sin embargo, los tés oolong de Taiwán, mejor conocidos como “Tés Oolong de Formosa”, también merecen estar en una buena colección y a mano.

Taiwán, de hecho, es el segundo mayor productor mundial de té oolong (detrás de su hermanastro gigante), y produce algunos de los mejores. En particular, el té oolong Imperial Formosa, de sabor intenso. ¿Por qué el nombre de Formosa? Así era conocida la isla de Taiwán. Poblada hace 600 años por pueblos de origen malayo-polinesio, fue avistada en el siglo XVI por los portugueses, quienes le dieron el nombre de Formosa (Hermosa, en portugués).

El Imperial Formosa es más complejo que muchos otros tés, con un maravilloso aroma floral y una fusión de sabores como melocotón, cedro y castaño. El final en el paladar es ligeramente dulce y suave.

Encontrarlo puede ser un poco difícil. Los tés Oolong de Formosa son más caros que los tés chinos, porque los costos de mano de obra son más altos en Taiwán. Sin embargo, al igual que el vino fino, los tés raros son más apreciados en diferentes niveles de sabor y aroma y vale la pena cualquier gasto extra.

CÓMO PREPARARLO

Los tés de Formosa se elaboran diferente a otros tés. Es recomendable una tetera de arcilla tradicional de Yixing para preparar tés oolong. Primero, vierte agua fresca y fría en la tetera y ponla a hervir. El agua purificada es preferible al agua del grifo para preparar té oolong porque su alto contenido mineral realza su sabor. Una vez que el agua hierve, retírala del fuego y deja que se enfríe.

A continuación, hay que “despertar” las hojas de té. Esto se hace vertiendo un poco de agua caliente sobre las hojas de oolong para enjuagarlas. Después, ponlas en la tetera y deja que se remojen durante aproximadamente un minuto. Ten cuidado de no preparar demasiado té oolong, ya que de lo contrario se vuelven amargos. Sírvelo frío o caliente.

Cada infusión de té hará que un aspecto diferente de los sabores sutiles sea prominente, permitiendo detectar más de las complejidades del té con cada taza. No se recomienda añadir leche, azúcar o limón al té oolong, porque perdería su propio sabor.

PARA LOS MARISCOS

Imperial Formosa es un gran té para disfrutar solo o con comida. El oolong es una excelente opción para servir con sándwiches, sopas y ensaladas. Además, es un buen complemento a las comidas picantes.

Los tés Oolong son deliciosos con platos de mariscos, como las langostas y las vieiras. También van bien con platos de pollo, especialmente con salsas a base de crema, y pato.

En muchas culturas, los cocineros tienen mucho cuidado de seleccionar un té con las recetas que preparan, de la misma manera que el vino es elegido para complementar la comida.

TAMBIÉN HELADO

Por último, el Imperial Formosa también es excelente para servir con postres, especialmente postres ligeros como el pastel de limón y el pudín de plátano.

Una vez que hayas descubierto los muchos matices del té oolong, querrás probarlo helado. Es muy refrescante, mientras que permanece lleno de sabor y fruta. Cuando lo prepares, deja que el té se enfríe antes de añadir hielo. Añadir hielo mientras el té aún está caliente diluirá demasiado el té. El sabor suave de Imperial Formosa se ve comprometido si se diluye demasiado.

Todos los que lo han degustado, han encontrado que es uno de los tés más interesantes. Con su compleja mezcla de sabores y textura ligera, complacerá tu paladar de muchas maneras y siempre dejará con ganas de más.

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Dulces, oxidados y con sabor a “Dragón Negro”

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